¡He vuelto de Irlanda y el blog vuelve a estar activo!
Siguiendo un trágico fin a su breve carrera como la super-heroína Joya (Jewel), Jessica Jones trata de reconstruir su vida como una detective privada, lidiando con casos que involucran a personas con habilidades destacadas en la ciudad de Nueva York.
Si habéis leído mi reseña sobre la serie, sabréis que la serie de Daredevil me encantó. Y cuando dijeron que se iban a hacer otras tres series sobre superhéroes (Jessica Jones, Luke Cage e Iron Fist), que se iban a juntar con Daredevil para hacer The Defenders decidí ver estas también.
El primer capítulo nos presenta a Jessica Jones, una investigadora privada maleducada, alcohólica y muy dañada. A esta le llega el caso de una chica desaparecida y ella decide hacerse con el caso. Pero cuando descubre quién está detrás de la desaparición de la chica, se volverá a encontrar con el hombre que le destrozó la vida: Killgrave.
Y así, Jessica se mete de lleno en el juego del gato y el ratón con Killgrave.
Me encanta la serie porque es oscura, pero tiene un toque detectivesco que mola mucho. Es como si fuese una película antiguas de detectives pero ambientada en el siglo XXI. Jessica Jones toca temas tan oscuros como la violación física y psicológica, el aborto, la oscuridad del ser humano,... Al igual que Daredevil tiene capítulos llenos de peleas contra mafias, Jessica Jones tiene capítulos llenos de una amenaza más sutil, más difícil de ver, pero que estalla cuando menos te lo esperas y de formas muy sangrientas.
Porque Killgrave (o Purple Man en el comic) es un hombre muy peligroso. Tiene el poder de controlar la mente de las personas y hacerles hacer lo que él les diga. Cualquier cosa que te diga, lo harás. No hay forma de huir de su control mental. Para Jessica, él es el hombre que la violo mental y físicamente durante meses. Y lo pero es que si le ves por la calle, nadie diría que es un loco sádico.
Ayudando a Jessica en su misión de acabar con Killgrave están su hermanastra, Trish Walker, una presentadora de radio, cuya madre acogió a Jessica cuando su familia murió en un accidente de coche, y la mejor amiga de Jessica, una chica que está dispuesta a ayudar a Jessica a salvar a la gente y que a mí me ha parecido un personaje súper interesante, Luke Cage, el hombre con una fuerza increíble y piel indestructible que tendrá su propia serie y que es el interés amoroso de Jessica y Malcolm, el vecino drogadicto de Jessica.
También está Hogarth, una abogada de éxito, despiadada y calculadora, que ayudará a Jessica a cambio de favores y que traerá sus propios problemas a la parrilla: Una infidelidad, una ex-mujer con ganas de venganza,...
Al principio parece que cada trama va un poco a su bola, que no hay conexión entre ellas, pero luego todas se entrelazan y marcan el camino que tiene que seguir Jessica para acabar con Killgrave.
Ahora bien, ¿es mejor o peor que Daredevil? No lo sé, porque no quiero hacer comparaciones. Me parece que son dos tipos de personas diferentes, con diferentes motivos y diferentes villanos, y que no se pueden comparar, porque son dos series diferentes contadas de diferentes formas.
¡Totalmente recomendable!
Una forma diferentes de ver el universo Marvel y cómo viven las personas normales en un mundo que tiene a los Vengadores, a Loki, etc.
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