Kate Winters ha ganado inmortalidad. Pero si quiere una vida con Henry en el Inframundo, tendrá que luchar por ella. Convertirse en inmortal no se suponía que sería la parte fácil. Aunque Kate está a punto de ser coronada Reina del Inframundo, ella está más sola que nunca. Y a pesar de su creciente amor por Henry, soberano del Inframundo, él se ha vuelto más distante y secreto. Entonces, en medio de la coronación de Kate, Henry es secuestrado por el único ser con poder suficiente para matarlo: el rey de los Titanes.
Mientras los otros dioses se preparan para la guerra y lo que esta podría traerles, depende de Kate salvar a Henry de las profundidades del Tártaro Pero para navegar por las interminables cavernas del Inframundo, Kate debe contar con la ayuda de una persona que podría amenazar su futuro.
La primer esposa de Henry: Perséfone
Después de pasar el verano en Grecia con James, Kate vuelve al Inframundo, esta vez como esposa de Henry y futura reina del Inframundo. Llena de dudas por la ausencia de Henry en su verano, Kate no sabe qué esperarse, si una bienvenida calurosa o un frío golpe de realidad. Pero cuando se acerca al Inframundo, Kate tiene una extraña visión: Calliope ha despertado a algo horrible, que pone nervioso hasta a los tres dioses mayores.
En la coronación de Kate, ese algo (el rey de los titanes), ataca y acaba llevándose con él a Walter (Zeus), Phillip (Poseidon) y Henry (Hades). Sin ellos, los otros dioses están desesperados. No tienen ninguna oportunidad de pelear contra el rey de los Titanes sin la ayuda de los seis grandes.
Pero Kate no quiere ni oír hablar sobre rendirse, por lo que con ayuda de James (Hermes) y Ava (Afrodita), parte en la búsqueda de la única persona que sabe dónde tiene Calliope a Henry y a sus hermanos: Perséfone.
Bueno, a ver, esta reseña la tendré que partir en dos grupos, porque es difícil explicar lo que me ha parecido sin hacer esa separación:
Por un lado, esta la búsqueda de Perséfone y las dudas de Kate. En parte esta parte me ha parecido un poco aburrida, pero en parte también me ha gustado, porque tenía ganas de conocer a la Perséfone que tiene loco a Henry y porque quería ver cómo se sentía Kate en su presencia. Perséfone, en sí, me ha parecido la típica petarda que se hace querer. Es bastante egoísta, pero tampoco creo que sea mala, y espero que se convierta en la hermana que Kate se merece. Y, en parte, entiendo la razón por la que se dejo a Henry. La casaron muy joven, con alguien que casi ni conocía y la metieron bajo tierra para que gobernase un reino que no conocía. No me parece bien que luego le pusiera los cuernos a Henry tan exageradamente, pero entiendo la razón por la que lo hizo.
Pero más que ella, me ha gustado ver cómo se siente Kate: En todos las partes de su vida, Kate es el remplazo de Perséfone. Nació para arreglar el desastre de Perséfone, es la segunda mujer de Henry, la que no controla sus poderes, la que no sabe nada sobre reinar en el Inframundo,... En todos los sentidos, Kate siente que es peor que su hermana. Es una faceta suya interesante, ya que justifica un poco las decisiones que va tomando. Al fin y al cabo, para Kate, Henry está enamorado de su hermana. Ella, como mucho, se convertirá en un buen reemplazo. Pero, para ella, nunca superará a su hermana.
Lo que nos lleva a la segunda parte de la reseña: La relación entre Kate y Henry. Mirad, yo no odio a Henry, es más, a veces me gusta y todo, pero hay que admitir que para ser un dios es bastante corto. Su gran defecto es que con Kate es más seco que una piedra (ni beso de bienvenida, ni palabras calmantes, nada que de a entender que se alegra de tenerla a su lado). Su actitud no ayuda en nada a calmar los miedos de Kate (que viendo cómo la trata, tiene razones de sobra para pensar que estorba). Cuando se llevan bien, son una pareja que puede llegar a ser muy mona, pero no me gusta nada que Henry siga aumentando (sin querer o queriendo, yo ya no lo sé) las inseguridades de Kate, teniendo en cuenta que en parte es su culpa que ella se sienta así.
En sí el libro es más de lo mismo: Calliope anda por ahí dando por saco, Kate intenta que Henry le demuestre algo de cariño y los dioses andan por allí dando vueltas.
Andar de paseo por el Inframundo le da un punto interesante pero tampoco mejora mucho la historia. Los personajes secundarios no ofrecen nada nuevo y la pareja sigue con el mismo rollo de siempre. El final sube un poco la apuesta, pero la verdad, no sé qué esperarme del siguiente libro, ya que no me acaba de gustar el giro que ha tomado la historia.
En sí, la saga no es mala, pero es un poco flojilla. Si vais a leerla, yo os recomiendo que no os esperéis mucho de ella. La mitología ha sido modificada a gusto de la autora (que en parte me parece normal, es su historia, que haga lo que quiera, pero ¿Ares es uno de los dioses que no quiere ir a la guerra? ¿El dios de la guerra NO QUIERE IR A LA GUERRA? Di que sí...) y la pareja no es muy diferente de cualquier pareja que te puedas encontrar en un libro de amor de este estilo.
Vamos, que no varía mucho de la línea que seguía el primer libro.
3/5
¿Conocéis la saga? ¿Qué os parece?
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